Pequeñas zonas costeras establecidas a inicios de 1979 para promover el desarrollo económico y la introducción de tecnología avanzada a través de la inversión extranjera. Se ofrecían condiciones y facilidades preferenciales especiales a los inversionistas extranjeros en cuanto a impuestos, tarifas de uso del suelo y control de entrada y salida para empresas conjuntas, empresas cooperativas y empresas únicamente con inversión extranjera. Las zonas económicas especiales tienen un mayor poder de decisión sobre las actividades económicas que las unidades de nivel provincial. La regulación del mercado es primordial.